Quito, 9 de Mayo, 2012
Si uno lee los discursos de Ollanta desde que asumió hasta ahora predominan dos temas con dos muy grandes dudas que el Estado debería estar en capacidad de resolver usando a favor del Presidente algo de los recursos que despilfarra:
a) El Económico: convencer a los grandes capitales y corporaciones de no dejar de invertir en el Perú reclamándoles respeto social y al medio ambiente. Pero sin desarrollar un nuevo proyecto de inversión minera-integrada a la descentralización de las regiones y a una reconversión agraria y alimentaria que le permitiría señalar un camino difícil pero viable técnica y políticamente superando la confrontación con un salto hacia adelante del Perú en el diseño del modelo post neoliberal (p.e. discursos económicos como en Davos o el del 8 de Abril sobre Conga).
¿En que gasta el sector público tanto dinero si no es capaz de rediseñar en profundidad la inversión minera-agraria, que no es cuestión de óbolos pero tampoco de retroceso a la autarquía en la pobreza de nuestras mayorías trabajadoras y emprendedoras?.
b) El Militar: donde se mueve con mayor soltura por su vivencia cercana tratando de conseguir mística y lealtad de instituciones claves para afianzar todo gobierno sobre todo cuando - el poder mediático maneja en su batalla por controlar el poder completo - la imagen que dejó el terrorismo senderista. Es en ese combate al "enemigo interno" donde justamente se forjaron los militares etnocaceristas y ahora nacionalistas disidentes de unos mandos de FFAA sometidas a Montesinos (p.e. los discursos de clausura del año en el Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea).
¿Logrará Ollanta evitar que las fuerzas que actúan en las sombras no sigan manipulando el tema terrorismo para ganar lo que no pudieron-aunque por poco- en las elecciones?
En ambos temas se nota el esfuerzo de Ollanta (y Nadine) por entender este complicado Perú y por no perder poder hacia uno o hacia el otro lado pero no cuentan con los recursos técnicos y políticos para definir las confrontaciones de intereses hacia quien ellos dicen defender. Cuidado: otros presidentes (casi todos) han terminado sucumbiendo a las diversas extorsiones y han preferido refugiarse en las pequeñas ventajas que los poderosos dan a los políticos para que "no se metan con ellos": es mucho más fácil en el Perú resolver -siempre hay honrosísimas excepciones) los problemas de los entornos de la Presidencia, el Consejo de Ministros, los Congresistas y permitir las inconductas de algunos altos funcionarios y muchos alcaldes que emprender el desmontaje real de las causas de los problemas, la pobreza, la desigualdad, el atraso de un país con tanta riqueza humana y material.
AUN ESTAS A TIEMPO DE CUMPLIR LO OFRECIDO, OLLANTA
Ollanta desde pequeño no fué tan estudioso y esforzado como algunos de sus hermanos, especialmente Antauro, pero supo tener la serenidad y cálculo fino para alejarse de éste a mediados de 2005, cuando para ser candidato no le convenía estar cerca del preso por el Andahuaylazo pero sí acercarse a gente de trayectoria e imagen técnica y progresista como Gonzalo García Núñez y a otros que lo traicionaron una vez que sacaron ventaja como los célebres Torres Caro y José Vega Antonio.
Algo similar está pasando ahora, en 2011-2012: hasta el sector oportunista del toledismo ha sido desplazado del Gobierno y hoy en el Gabinete faltan dedos de la mano para contar Ministros que no votaron por Keiko. ¡El Perú tiene otra vez un Gabinete Fujimontesinista!
Antauro y su ex pareja Isabel Paiva son -con el incansable trabajo de Don Isaac y Doña Elena - los grandes constructores del espacio y proceso político y social que llevaron a Ollanta (y Nadine) al gobierno, pero no al poder. Este lo siguen teniendo los grandes capitales y corporaciones aunque también otros sectores como las tecnocracias y burocracias que parasitan el Estado criollo- que requieren gobiernos cipayos y sinvergüenzas para seguir haciendo ganancias extraordinarias con los recursos naturales y el trabajo y consumo básico de bienes y servicios de 30 millones de peruanos.
Mientras Antauro paga con ya 8 años de cárcel sus errores personales y políticos y algunos vacíos de formación política, aunque seguro que son menores que los de sus hermanos. Pero sobre todo está pagando ahora con prisión idéntica a Montesinos y Abimael (no a Fujimori pues el Perú no ha cambiado) el arrojo y coraje que requiere el Perú para transformarlo. Los Carlos Tapia, Salomón Lerner Ghitis, Sinesio López, Ricardo Giesecke, Félix Jiménez, José de Echave, Hugo Cabieses y tantos otros esforzados patriotas entienden ahora que Ollanta no está (espero que esto sea un todavía y no algo incurable) a la altura del gigantesco desafío que es hacer la transformación que el Perú necesita.
Ojala con Nadine y sus leales de verdad recapaciten, vayan a ver a su compañero de luchas iníciales estúpida e ilegalmente preso en la Base Naval ¡como si fuera un Montesinos o un Abimael! y vuelva al camino del pueblo en vez de adentrarse por la ruta de los mercenarios y los felipillos, sus antecesores, excepto Valentín Paniagua. Aún estás a tiempo Comandante Ollanta y Primera Dama Nadine no demoren más años a este gran pueblo peruano que los ha puesto en muy poco tiempo en el Palacio de Gobierno!
MANUEL LAJO LAZO
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